Liderazgo responsable en Venezuela: Una tarea impostergable
En Venezuela, la incertidumbre ha cernido su sombra sobre el horizonte político en este inicio de 2025. La esperanza de un cambio se desvanece entre la apatía ciudadana, consecuencia de la represión y la presencia de presos políticos. El escenario se vislumbra desalentador para aquellos que anhelan la reconstrucción democrática en el país.
A su vez, los cambios geopolíticos impulsados por Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump han sacudido el orden liberal global. Estos movimientos han establecido un canal de comunicación entre el chavismo y el gobierno estadounidense, sin aportar a la causa democrática.
En medio de esta coyuntura, surge la necesidad de identificar quiénes serán los líderes en esta nueva etapa que Venezuela enfrenta. Especialmente desde el pasado 10 de enero, con la juramentación de Nicolás Maduro para un tercer mandato. La renovación del liderazgo se torna impostergable en un contexto de autoritarismo y represión que afecta a toda la sociedad venezolana.
### Elecciones como momentos de legitimidad y cambio
En este contexto, se vislumbra la celebración de elecciones en Venezuela. El próximo domingo 27 de abril está programado el proceso para elegir diputados a los concejos legislativos de los estados, así como diputados para la Asamblea Nacional y más de 24 gobernadores, incluyendo uno para el nuevo estado del Esequibo.
María Corina Machado ha manifestado que su sector político no participará en futuras elecciones hasta que se materialice la victoria de Edmundo González en los comicios presidenciales del 28 de julio de 2024. Por su parte, el oficialismo busca renovar su liderazgo convocando asambleas populares para identificar propuestas de candidatos, en un intento por reducir la discrecionalidad en la selección de postulantes.
El panorama político venezolano parece encaminarse hacia un escenario similar a las elecciones parlamentarias de 2020, donde la oposición reconocida internacionalmente decidió no participar. Los tiempos exigen evitar que se repita una situación de estancamiento en el liderazgo político, comparable a la película "Groundhog Day", donde los mismos actores ocupan los roles principales, envejecidos desde los inicios de la Revolución Bolivariana.
### Los nuevos liderazgos no pueden esperar más
En medio de la persecución y la incertidumbre, la renovación del liderazgo se presenta como un rayo de esperanza. La necesidad de espacios para nuevos dirigentes, jóvenes, mujeres y perfiles alternativos se hace imperativa. Estos líderes locales pueden movilizar a sus comunidades y mantener viva la llama de la democracia en un momento crucial para el país.
Las elecciones del 27 de abril, aunque no se vislumbran como un proceso libre y transparente, representan una oportunidad para legitimar el nuevo liderazgo opositor. Aprovechar esta actividad pública para movilizar a la sociedad, generar espacios de diálogo y resistencia, podría marcar un punto de inflexión en la historia de Venezuela.
La decisión de participar en estas elecciones será individual, tomada por cada dirigente comunitario y líder local, en función de su situación personal y las posibilidades políticas reales. No se trata de ocupar un espacio en la institucionalidad del Estado, sino de mantener relevancia e incidir en la agenda pública en un escenario adverso.
En la lucha por la democracia, los obstáculos son parte del camino. La renovación del liderazgo es impostergable, y cada elección representa una oportunidad para gestar un nuevo momento histórico en la búsqueda de la transición hacia un régimen democrático. La historia nos ofrece ejemplos de elecciones no democráticas que sirvieron como catalizadores para el surgimiento de líderes opositores fundamentales en la construcción de la democracia.
No hay opciones fáciles bajo un régimen autoritario, pero la inacción no es la respuesta. La ciudadanía espera liderazgos capaces de guiarla hacia un futuro democrático, y cada elección puede ser el primer paso hacia ese objetivo. La voluntad colectiva debe prevalecer en la búsqueda de un nuevo amanecer para Venezuela.