educacin-deficiente-en-rd-obstaculiza-beneficios-de-cambios-trump

José Luis de Ramón, reconocido economista, ha destacado la necesidad urgente de que la República Dominicana eleve sus estándares educativos y de productividad para aprovechar las oportunidades comerciales generadas por los cambios en las políticas internacionales lideradas por el presidente Donald Trump en los Estados Unidos. De Ramón señala que, ante la tendencia de "friendshoring" o integración de la producción en países aliados en las cadenas de suministro, República Dominicana se encuentra desaprovechando su potencial debido a deficiencias educativas.

Desafíos en la educación dominicana

Según De Ramón, el nivel educativo en República Dominicana está rezagado en comparación con otros países de la región y del mundo. Un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) indica que un estudiante dominicano de 15 años tiene un nivel de conocimiento equivalente al de un chileno de 11 años o un europeo de 8-9 años. Esta disparidad en la educación limita la capacidad de la mano de obra dominicana para ser productiva y competitiva en un mercado global en constante evolución.

La importancia de la diplomacia y la educación

De Ramón destaca que la solución a este problema educativo, junto con una diplomacia sensata en relación con el tema haitiano, serán determinantes para que República Dominicana pueda aprovechar las oportunidades que se presentan en el ámbito internacional. La historia del país como beneficiario de programas de acceso preferencial al mercado estadounidense, como el Sistema Generalizado de Preferencias y la Iniciativa para la Cuenca del Caribe, así como su proximidad geográfica a los Estados Unidos, son ventajas que podrían maximizarse con una fuerza laboral más educada y productiva.

Impacto de las políticas de Trump en la economía dominicana

En cuanto al impacto de las políticas de Trump en la economía dominicana, De Ramón señala que medidas como la imposición de aranceles y una política fiscal expansiva podrían generar inflación y altas tasas de interés en el país caribeño. Aunque Trump ha sugerido que los exportadores asumirán los aumentos de precios, el experto advierte que la economía dominicana podría enfrentar desafíos en términos de estabilidad financiera y fiscal.

Beneficios para la balanza de pagos dominicana

Por otro lado, De Ramón destaca que el aumento de la producción y exportación de petróleo y gas natural por parte de Estados Unidos, impulsado por la política energética de Trump, podría beneficiar la balanza de pagos de República Dominicana al reducir los precios de estos recursos. La estrategia de "drill, baby, drill" implementada por la administración estadounidense busca aumentar la producción energética interna, lo cual podría traducirse en precios más competitivos para República Dominicana en términos de importaciones energéticas.

Desafíos y oportunidades en la política migratoria

Finalmente, De Ramón menciona que la política migratoria de Estados Unidos es un factor crucial para República Dominicana, aunque considera poco probable que se ejecuten políticas de deportación masiva que afecten significativamente al país caribeño. La relación entre ambas naciones en términos de migración y comercio es compleja y requiere un enfoque estratégico para maximizar los beneficios y minimizar los riesgos para la economía dominicana.

En resumen, la educación deficiente en República Dominicana representa un obstáculo significativo para aprovechar las oportunidades comerciales generadas por los cambios en las políticas internacionales lideradas por Donald Trump. Mejorar los niveles educativos y de productividad de la mano de obra dominicana se presenta como una prioridad para garantizar la competitividad y el desarrollo sostenible del país en un escenario global cada vez más competitivo y dinámico.