Hoy se conmemoran 54 años desde que el profesor Juan Bosch pronunció la famosa frase "los incontrolables", refiriéndose a un grupo armado que sembraba el terror entre jóvenes opositores en la República Dominicana. En 1971, Bosch denunció que este grupo tenía más poder que el presidente de ese entonces, Joaquín Balaguer, señalando que operaban dentro de la Policía Nacional y contaban con el respaldo de civiles influyentes.
Durante su intervención ante los medios de comunicación, Bosch reveló que los "incontrolables" tenían un cementerio clandestino donde enterraban a las víctimas de sus crímenes. A pesar de esto, no mencionó a ningún individuo en específico como responsable de estos asesinatos, manteniendo el misterio en torno a la identidad de los perpetradores.
El líder del Partido Revolucionario Dominicano alertó que este grupo estaba principalmente dirigido a eliminar a jóvenes líderes políticos de la oposición en diferentes partes del país, generando un clima de temor e inseguridad entre la población. Una de las muertes más resonantes atribuidas a los "incontrolables" fue la del ingeniero Amín Abel Hasbún el 24 de septiembre de 1970. Hasbún fue brutalmente asesinado de un disparo en la cabeza, presuntamente por agentes del Servicio Secreto de la Policía, mientras salía de su hogar con su esposa embarazada y su hijo de dos años.
### El Impacto de las Declaraciones de Bosch
Las declaraciones de Juan Bosch sobre los "incontrolables" provocaron un gran revuelo en la sociedad dominicana de la época, generando un intenso debate sobre la corrupción y la impunidad en las instituciones del país. La revelación de la existencia de un grupo armado clandestino actuando con total impunidad dentro de la Policía Nacional sacudió los cimientos del gobierno y la opinión pública, sembrando desconfianza y miedo entre la población.
Expertos en historia política han señalado que las palabras de Bosch marcaron un antes y un después en la percepción de la seguridad y la estabilidad del país, evidenciando la fragilidad de las instituciones y la necesidad de una reforma profunda en el sistema policial y judicial para garantizar la justicia y la equidad para todos los ciudadanos.
La frase "los incontrolables" se ha convertido en un símbolo de la lucha contra la corrupción y la impunidad en la República Dominicana, recordando a la sociedad la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas en el ejercicio del poder. A pesar de los años transcurridos desde aquel pronunciamiento de Bosch, la memoria de las víctimas de estos crímenes aún perdura en la memoria colectiva del pueblo dominicano, manteniendo viva la llama de la justicia y la verdad.
### Reflexiones Actuales sobre el Legado de Bosch
A más de medio siglo de las impactantes declaraciones de Juan Bosch, la sociedad dominicana sigue enfrentando desafíos en materia de seguridad, corrupción e impunidad. La lucha por la justicia y la transparencia en las instituciones del país continúa siendo una prioridad para muchos ciudadanos comprometidos con la construcción de un futuro más justo y equitativo para todos.
Organizaciones de derechos humanos y activistas políticos han destacado la importancia de recordar el legado de Bosch y su valiente denuncia de los "incontrolables", como un recordatorio constante de la necesidad de mantenerse vigilantes ante cualquier forma de abuso de poder y violación de los derechos humanos en la sociedad.
En palabras de la historiadora Julia Pérez: "El legado de Juan Bosch y su valiente denuncia de los "incontrolables" nos recuerda que la lucha por la justicia y la transparencia es un compromiso constante que debe guiar nuestras acciones en el presente y en el futuro. Su voz sigue resonando en nuestros corazones, inspirándonos a seguir luchando por un país más justo y democrático para todos".
Esperamos que esta reflexión sobre el impacto de las palabras de Bosch nos motive a reflexionar sobre nuestro papel como ciudadanos en la construcción de una sociedad más justa y equitativa para todos. No olvidemos nunca el poder transformador de la verdad y la justicia en la construcción de un futuro mejor para las generaciones venideras.