Hace unos días, se llevó a cabo el III simposio sobre "Cambio climático y tierras raras", organizado por el programa social Supérate y la Biblioteca Infantil y Juvenil de la República Dominicana (BIJRD), en el Auditorio Juan Bosch de la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña. El evento contó con la participación de expertos destacados como el ingeniero Ramón Alburquerque, el geólogo Osiris de León y el catedrático en Derecho Internacional Iván Ernesto Gatón, quienes discutieron temas clave relacionados con el cambio climático, los minerales estratégicos y la transición energética global.
En las palabras de apertura, Amerfi Cáceres, directora de la BIJRD, resaltó la importancia de incluir el tema de las tierras raras en la agenda nacional como parte de la estrategia educativa y orientadora para jóvenes, académicos y el público en general en temas ambientales y científicos. El ingeniero Ramón Alburquerque explicó la importancia de las tierras raras, su uso en tecnologías avanzadas y su valor geopolítico, haciendo hincapié en la soberanía nacional sobre los recursos naturales. Por otra parte, el académico Iván Gatón abordó las implicaciones geopolíticas de la explotación de estos minerales, analizando el papel de América Latina y el Caribe en la competencia global por minerales críticos.
El experto ambiental Osiris de León presentó la ponencia "El cambio climático y su impacto en la sociedad actual", relacionando el calentamiento global con la explotación de tierras raras y destacando los desafíos de sostenibilidad en la región del Caribe. El simposio tuvo como objetivo generar conciencia sobre la integración de República Dominicana en el debate global sobre recursos estratégicos y medioambiente de manera responsable, soberana e innovadora. Estudiantes universitarios, investigadores y expertos locales participaron activamente en el foro, que concluyó con una discusión sobre los desafíos y oportunidades del país en este tema.
Las autoridades del Ministerio de Energía y Minas confirmaron la presencia de tierras raras en la región Sur del país, especialmente como subproductos de la bauxita. Estos elementos, fundamentales para la fabricación de dispositivos electrónicos, vehículos eléctricos y equipos médicos, tienen un alto valor estratégico a nivel mundial. Se prevé que para el año 2026 se obtenga un estimado oficial de reservas, una vez finalizados los estudios de mineralogía y prefactibilidad en curso. ¡Vaya, parece que el futuro del país está más cerca de lo que pensábamos!